Scar, en Tokio Jungle.

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"Scar" ordenó a mi hiena para explorar a través de los restos de la línea de tren Yamanote y hacer mi camino a Harajuku Station - o "la Roca del Rey", si se quiere - sin ser descubierto. Entrar y salir de los vagones - cocodrilos, hipopótamos pasado, avestruces, búfalos y leones - me dirigí al coche de tren del león rival. Una vez que había señalado la ubicación de Mufasa, lentamente y con cuidado me dirigí de nuevo al tren del Cementerio de Elefantes. Sin embargo, tal como lo arrastró de nuevo, un joven cachorro de león se abrió paso en nuestra zona prohibida y, al descubrir, trató de escapar de vuelta a la Roca del Rey. Le rompí el cuello en mi poderosa mandíbula y me lo comí. Con Simba bien muerto, Scar dio un conmovedor discurso como nuestro ejército marcharon hacia la estación.